Bicromía
Introducción
La antítesis, vocablo de origen latino tardío que se deriva del griego «anthitesis», ha sido objeto de previo estudio. La Real Academia Española (RAE) nos brinda su definición tradicional, pero planteo una interrogante: ¿qué sucede si en lugar de ser opuesta a otra cosa, se contrapone a uno mismo?
Me inclino hacia una concepción alternativa de este concepto. No pretendo afirmar que sea superior o inferior, sino que considero que la definición provista por la RAE se muestra insuficiente para expresar lo que deseo exponer.
Con este trabajo, mi única intención consistía en plasmar una radiografía de nuestra esencia interna. A continuación, se pueden apreciar dos imágenes superpuestas en las radiografías. Una de ellas se presenta en tonos azules, mientras que la otra se tiñe de rojo.
La elección de estos dos colores resulta sencilla, ya que se encuentran ubicados diametralmente opuestos en el círculo cromático, y aporta al proyecto aquello que deseo representar: dos perspectivas completamente antagónicas.
Posteriormente, abordaré en profundidad el fenómeno que ocurre y busco obtener, denominado «Color Channel», el cual busca fusionar distintos canales de color combinados a través de diversas tomas fotográficas para construir una imagen novedosa.
Desarrollo
Nuestra existencia está repleta de decisiones: levantarnos o continuar durmiendo, desayunar o no hacerlo, optar por Cola-Cao o Nesquik, ir al trabajo en coche o en autobús… y estas son solo algunas de las múltiples opciones que se nos presentan cada mañana.
No obstante, existen decisiones de mayor trascendencia que las anteriores. Estas implican una inversión de tiempo considerable y, por lo general, suscitan argumentos a favor y en contra.
En este proyecto, he buscado plasmar a través de fotografías esas dos posturas que adoptamos al momento de elegir.
Por un lado, encontramos en nuestro interior esa voz interior que conoce lo que debemos hacer, lo que es responsable y lo que no lo es. En ocasiones, también es la voz que nos impulsa a realizar actos altruistas.
Por otro lado, se alza esa otra voz mucho más íntima, más personal. Esta voz se preocupa por nuestro propio bienestar individual. Satisface nuestras pasiones y anhelos más profundos.
En este punto, quiero aclarar categóricamente que no pretendo establecer cuál de ellas es superior o inferior. Deseo recalcar que ambas son parte de nosotros y revisten gran importancia, ya que ambas nos guían hacia una buena decisión.
Técnica
La técnica empleada lleva por nombre «Color Channel» y, como previamente expliqué, consiste en fusionar dos fotografías distintas con tonalidades diferentes.
Este tipo de fotografías suele destacar por su marcado contraste y permite mostrar en una misma composición dos o más elementos distintos.
La razón detrás de mi elección de esta técnica es resaltar aún más la dualidad presente en el proyecto. Al combinar dos colores opuestos y mostrar elementos contrapuestos, se realza el concepto que pretendo transmitir.
Existe una perspectiva totalmente distinta a la que estamos acostumbrados, y es ahí donde radica la fascinación de este trabajo: el punto de vista.
Si superponemos la gelatina de color sobre la fotografía, solo se revelará uno de ellos. En otras palabras, al colocar la gelatina roja sobre las diferentes fotografías que poseemos, podemos observar que solo se muestra una de las dos composiciones, mientras la otra se difumina en el fondo.
Este fenómeno guarda una estrecha relación con el punto de vista, pues, como mencioné anteriormente, necesitamos conocer ambas versiones de nosotros mismos para tomar decisiones acertadas.
Proceso
Para la realización de este proyecto, conté con la colaboración de Álvaro Dueñas, compañero de Comunicación Audiovisual. Él amablemente accedió a posar para este proyecto.
Gran parte del éxito de este trabajo se debe a una cuidadosa planificación. Reflexioné sobre los materiales necesarios, los días que eran convenientes para nuestro modelo y los días en que los platós estaban disponibles. Buscaba crear un ambiente de penumbra, por lo que bastaba con solicitar un foco de luz LED. También utilicé dos gelatinas de color rojo y azul. Realicé numerosas pruebas, explorando diferentes posiciones de la luz con respecto al modelo. Probé tener la luz directamente de frente, en perfil, debajo del eje de su mirada y también por encima del mismo.
La posición de la cámara también fue de suma importancia. No soy adepto a los trípodes, así que opté por utilizar la técnica de fotografía a mano alzada. Al inicio, me coloqué frente al modelo, pero a medida que avanzaba la sesión, me moví para captar sus diversos perfiles.
Durante todo el proceso, tuve una premisa clara: si observamos todas las composiciones, notaremos que la fotografía azul siempre mira hacia la izquierda, mientras que la fotografía roja lo hace hacia la derecha. Esto puede tener diferentes connotaciones según la reacción del público o la identificación personal. Por ejemplo, puede representar el valor frente al miedo. Hasta ahora, solo he mencionado una de las múltiples posibilidades existentes. Sin embargo, lo que queda claro es que se genera una antítesis en cada composición.
Conclusión
En términos de conclusión, debo expresar mi plena satisfacción con el resultado obtenido. Durante un tiempo, albergaba numerosas ideas en mi mente: el uso del azul y el rojo, la superposición de imágenes, la creación de ambientes diversos y otras consideraciones. En cierto modo, me obsesioné con este proyecto, aunque nunca había encontrado la oportunidad adecuada para llevarlo a cabo.
La combinación de los colores azul y rojo ha resultado sumamente interesante, por lo que ahora presento mi última composición. Esta, sin lugar a dudas, es la radiografía que más aprecio. A simple vista, puede parecer poco notable, pero si seguimos la metodología previamente mencionada, nos encontraremos con que al colocar las distintas gelatinas se revelan fotografías ocultas.